Su Venida Fue Predicha

Hoy se conmemora aquella entrada triunfal que hizo Jesús sobre un pollino a la ciudad de Jerusalén (Marcos 11:1-11); días después sería llevado al Gólgota, el monte donde fue crucificado. Este día es llamado “domingo de ramos” ya que durante el recorrido realizado por Jesús muchos tendieron sus mantos sobre el camino y otros tendieron ramas que habían cortado de los campos.

Esta gran entrada fue un cumplimiento (Zacarías 9:9) de una de las tantas profecías de las que estuvo precedida la vida del Salvador; cientos de años antes del nacimiento de Jesús, las Sagradas Escrituras, predecían, mediante las palabras de los profetas de Israel, su venida. El Antiguo Testamento, escrito por varios autores durante un período de 1,500 años contiene más de 300 profecías con los detalles de su venida, cada una de ellas se cumplió durante la vida, muerte, y resurrección de Jesús, exactamente como lo predijeron los profetas.

La vida que Jesús vivió, los milagros que Él hizo, las palabras que habló, su muerte en la cruz, resurrección y ascensión al cielo todo esto señala el hecho de que Él no fue meramente un hombre, sino más que un hombre.


¿Qué debemos comprender hoy?

Que Jesús es verdadero, que Dios es real y que por más que luchen por permutar su verdad, existe dentro de ti una necesidad de Dios que en un momento u otro nos atrae a él. Tal es la historia de C.S. Lewis, profesor de Filosofía en la Universidad de Oxford, Inglaterra, quien siendo un gnóstico que por muchos años negó la deidad de Cristo después de estudiar las avasalladoras evidencias de Dios explicó y defendió la fe cristiana y puso su talento y sus conocimientos al servicio de Dios.

En la cultura judía siempre un rey guerrero entraba montando un caballo, pero un rey en misión de paz y amistad entraba montado sobre un asno o pollino, por otra parte el despojarse de sus mantos y colocarlo en el camino, así como cortar aquellas ramas era señal de reverencia, es necesario saber que para el judío el manto representa cobertura, autoridad , en sí es un apreciado atuendo y el despojarse de estos es algo realmente significativo.

Es nuestro deseo que Jesús pueda ser reconocido en tu vida como el Príncipe de Paz, que juntos podamos despojarnos de posesiones y posiciones; donde no importa quienes seamos: si Doctores, Licenciados o poseedores de otro título o labor , lo reconozcamos en nuestro corazón y rindiendo nuestros conocimientos, dones ,talentos y al igual que Lewis, podamos servirle.

Para escuchar el audio visite http://www.notivargas.com

Fuente: La Biblia / Depósito Legal: pp201001ya1343